La revisión en el penal de Apodaca causó la molestia de los internos este 31 de enero y provocó el despliegue de autoridades federales y estatales.
Decenas de elementos de Fuerza Civil con equipo antimotín, así como efectivos de la Guardia Nacional, llegaron al Cereso de Apodaca, para tratar de calmar los ánimos de los reos.
Según una fuente de la Secretaría de Seguridad Pública del Estado de Nuevo León, se realizaba una revisión en la zona número uno del penal de Apodaca, donde tras darse cuenta los reos de la zona número dos iniciaron los disturbios ante la inconformidad.
En el lugar donde se usó gas lacrimógeno, se decidió suspender las visitas programadas ante la inconformidad de los familiares asistentes.
Más tarde las autoridades informaron que se logró el aseguramiento droga, un celular y armas punzocortantes.
Tras el operativo, personal de seguridad y custodia de Fuerza Penitenciaria, apoyados por policías de Fuerza Civil, recorrieron diversas áreas confirmando que la situación estaba bajo control.